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Capital

Con un año tan excepcional como el que hemos tenido de pandemia, las empresas requieren fórmulas que les ayuden a salvaguardar tanto su capital como su patrimonio.

En primer lugar debemos abordar los conceptos, ya que por capital social entendemos la aportación que hacen los propietarios o socios de una empresa. Dicho capital junto con el conjunto de propiedades, bienes y derechos que tiene una empresa conformar su patrimonio.

En otras palabras podríamos decir que en sus inicios las empresas sólo tiene un capital social. No obstante, con el paso del tiempo, ese capital va creciendo e incrementado el patrimonio.

Diferencia entre capital y patrimonio

El capital se refiere a los recursos con los que cuenta una empresa para satisfacer una necesidad o desempeñar una actividad determinada. Estos se cuantifican en una partida contable.

El patrimonio lo constituyen los bienes, obligaciones y derechos de una sociedad.  Estos están representados en los balances económicos y financieros de una empresa.

En definitiva el significado de capital alude a un recurso y el de patrimonio alude a la riqueza.

Formas de proteger el capital de una empresa

Una práctica frecuente en función del capital disponible es recurrir al ahorro o la inversión, el primero ofrece mayor seguridad y el segundo mayor rendimiento.

Cuentas de Ahorro y Fondos Mutuales

Las cuentas de ahorro y los fondos mutuales son los predilectos en un horizonte a largo plazo, porque reducen los efectos adversos de la inflación y el riesgo de los mercados bursátiles.

Fondos indexados o carteras de inversión

Si por el contrario, queremos mejores rendimientos en un horizonte cortoplacista debemos asumir los riesgos que trae la volatilidad de los mercados bursátiles.

Una alternativa interesante son los fondos indexados porque te ofrecen la posibilidad de invertir en índices completos, en los que comprando una participación, estas adquiriendo una pequeña parte de todas las empresas que lo integran.

También encontramos los fondos “Volatily Targeting” que tienen bajo nivel de riesgo y equilibran riesgo y rentabilidad en el tiempo. De modo similar encontramos los ”hedge funds” un instrumento de inversión que permite invertir en una gran variedad de mercados con diferentes niveles de riesgo y apalancamiento para hacer frente a las fluctuaciones.

La diversificación es clave

Hoy más que nunca conviene diversificar, mezclando acciones de valor y crecimiento con otros activos, como bonos y activos inmobiliarios. Ello con la finalidad de mejorar potencialmente los perfiles de riesgo y la rentabilidad de las carteras.

La principal ventaja que ofrece la diversificación es disminuir el riesgo de que los activos reaccionen de la misma manera.

Evidentemente, es la combinación la que permite mayor cobertura frente a los movimientos del mercado.

Esto se demuestra en la práctica al analizar el rendimiento de los distintos tipos de activos, ya que no necesariamente están correlacionados. De esta forma, el impacto sobre una cartera de determinados activos que pierden valor, puede estar recompensado con otros que generan beneficios.

Formas de proteger el patrimonio de una empresa

Mientras más empleados, más clientes y más inventario tienen las empresa, más dinero hay circulando y en consecuencia más problemas y riesgos tienen asociados.

A continuación se enumeran algunas acciones que ayudan a proteger el patrimonio de una empresa:

Controles internos

Entre estos destacan la definición de KPIs (Key performance indicators o Indicadores clave de rendimiento) estos permiten definir los objetivos, recursos y plazos que guían el desarrollo y crecimiento de la organización.

Los mencionados indicadores alinean a los diferentes departamentos en la consecución de objetivos, detectan brechas y permiten introducir correctivos que aseguren el éxito.

Dentro de estas acciones también citamos la realización de inventarios, arqueos de caja, auditorias y procedimientos de control para la emisión de órdenes de compra y/o pagos.

Infraestructura de seguridad

Los sistemas de alarmas permiten detectar una amenaza y ejecutar acciones que impidan o minimicen las consecuencias. Desde la detección de un intruso hasta la previsión de accidentes o incendios.

En este apartado se incluyen las pólizas de seguros que cubren no solo los daños al patrimonio sino también la responsabilidad hacia terceros.

La seguridad informática o ciberseguridad también forma parte esencial, ya que protege equipos, sistemas, aplicaciones y redes, así como también a las personas y a la información o data.

Propiedad intelectual

Si la empresa ha realizado alguna creación, invento, modelo de utilidad, obra literaria o artística, es muy importante que procesa desde el mismo momento a registrar la propiedad intelectual, ya que es la única forma de defender su autoría.

De esta manera la propiedad intelectual garantiza los derechos de autor, patentes y marcas, permitiendo a sus propietarios obtener ganancias por su invención o creación.

“…el dinero de los tontos es el patrimonio de los listos“ – Antonio Pérez Reverte –

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