La factura de electricidad para un consumidor ha subido 44% con respecto a 2020. Del total de la factura 35% corresponde al consumo eléctrico a precio mayorista, el 40% corresponde a los peajes de acceso a la red y cerca del 25% restante, al IVA e impuesto de electricidad.
1) Emerge un consumidor de electricidad más informado
La nueva tarifa de luz busca incentivar un consumo eficiente de la electricidad. Una repercusión es que emerge un consumidor de luz más informado sobre las horas más aptas para el consumo.
Una de las razones del aumento es que los consumidores tengan un papel relevante en la descarbonización, para que contribuyan con la reducción de la emisión de dióxido de carbono.
La regulación prevé que estos “comportamientos eficientes” del consumidor puedan abaratar el recibo de luz porque pagarán por la electricidad según la hora del día en que la consuman.
2) ¿Cuáles son las repercusiones inmediatas?
Pues en primer lugar tener un consumidor más educado e informado de los costes en los horarios establecidos para el consumo.
Ello significa que el usuario con potencia contratada inferior a 15 KW, debe conocer muy bien lo que abarca los horarios punta, llano y valle, así como la situación de los fines de semana y festivos. De esta manera, podrá organizar su consumo.
Las horas punta son aquellas en que el consumo es más caro, comprende el tramo 10-14h y 18-22h, después le siguen las horas llano de precios intermedios y comprende los tramos 8-10h, 14-18h y 22-00h. Por último, las horas valle que son aquellas en que el consumo eléctrico es más barato y comprende de 00:00-08:00h, fines de semana y festivos 24 horas.
Los principales afectados de esta medida son los consumidores con Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC), es decir mercado regulado al que pertenecen cerca de 11 millones de personas. En este sentido, se estima que las tarifas estructuradas por tramos horarios afectan principalmente a las familias con economías más desfavorecidas (FACUA)
3) ¿Cómo afecta la nueva tarifa a las empresas e industrias?
Las grandes empresas también verán reflejado un encarecimiento de su factura, ya para abril denunciaban un incremento del 13%, por lo que muchas de ellas ven amenazada su competitividad.
Hoy por hoy, España paga la luz más cara de Europa aproximadamente un promedio de 88,47 euros/megavatio hora, es decir una brecha de 37 euros en las horas centrales del día, con respecto a los vecinos europeos.
Muchas empresas necesitan 24 hora de suministro eléctrico, pues son fábricas e industrias que no paran ni un segundo durante el año. Para ellas no aplica el consumo por horario.
En conclusión, los empresarios e industriales españoles demandan con urgencia un precio eléctrico competitivo, estable y predecible.
4) ¿A qué se debe la subida?
El cuento se inicia en 2005 cuando la Unión Europea lanzó el comercio de derechos de emisión de dióxido de carbono, un instrumento de mercado mediante el cual se crea un incentivo económico para controlar y reducir las emisiones contaminantes. Es decir, “Quien contamina lo paga”
El dióxido de carbono sale de las chimeneas de las fábricas, de los sistemas de calefacción y de los tubos de escape de los coches. Hay muchas otras fuentes pero la principal es la energía.
Este mercado comenzó cotizando a 10 euros la tonelada y por años se mantuvo en 7 euros. En 2018 subió a 20 euros, pero este año ha llegado a superar los 55 euros la tonelada, cotización máxima desde su creación.
En España la mayor cantidad de energía se produce con combustibles fósiles, gas y carbón, pues la falta de lluvia, embalses vacíos y la falta de viento no permite la producción de energía alternativa más baratas como la hidráulica y la eólica.
Otra razón del alza del recibo de luz esta marcado por los precios del mercado mayorista. Una mayor demanda de electricidad de países como Francia marca una tendencia hacia el alza de los precios.
5) La nacionalización no funciona y no es una solución
Por años se ha hablado de la nacionalización del sistema eléctrico español como la solución para evitar alzas de la electricidad. Pero nada más alejado de la realidad.
Como hemos visto hay algunos factores externos que no se pueden controlar así que poco podría hacer el Gobierno para evitar alzas. Es más lo que el mismo consumidor puede hacer colocando su granito de arena y direccionando su consumo hacia horas más baratas.
Aeropuertos, trenes y vías en España son de carácter público y no se pueden permitir retrasos para encajar su operación en tramos horarios. Aunque muchas veces los retrasos originados por la nieve, tormentas y otros factores no pueden ser controlados.
6) Consumir en horas valle
Lavadora: La mayor parte del gasto viene del calentamiento del agua. La recomendación es lavar a baja temperatura como medida de horro y ponerla a lavar en la noche para que esté lista en la mañana.
Secadora: Es otro de los electrodomésticos que mas gasta. Se recomienda disminuir su uso o hacerlo en las horas valle. Es importante centrifugar la ropa primero.
Horno: Es un generador de calor lo que lo convierte en un gran consumidor de electricidad. Se recomienda apagarlo antes de terminar la comida para aprovechar el calor acumulado los últimos minutos y no abrir la puerta durante su uso.
Microondas, cafetera, aspiradora y plancha son electrodomésticos generadores de calor y por lo tanto consumidores de electricidad. Importante saber estos detalles para controlar su uso.
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